La patria que Wilfredo Vallín amó, esa Cuba profunda, culta, posible, aún espera a quienes se atrevan a pensarla libre.
La Habana (Sindical Press) – Hay hombres que mueren sin haber vivido, y otros que, aun después de morir, continúan dando testimonio de vida. Wilfredo Vallín Almeida pertenece a estos últimos.
No porque su cuerpo ya no camine las calles que defendió con palabra firme, sino porque su voz, mezcla de razón jurídica y ternura patriótica, sigue resonando como un eco de dignidad en una tierra demasiado acostumbrada al silencio.
Fue un hombre de leyes, sí, pero sobre todo un hombre de principios. En una nación donde el derecho se convirtió en disfraz del poder, Vallín se atrevió a devolverle su significado original: el límite frente al abuso, la frontera moral que separa la civilización del miedo. Desde su cátedra, su despacho o su modesto apartamento habanero —cátedra, despacho y hogar a la vez— enseñó que la justicia no es una concesión del Estado, sino un deber del ciudadano.
Su devoción por José Martí fue más que erudición: fue filiación espiritual. Como Martí, creyó que amar a Cuba era decirle la verdad, incluso —y sobre todo— cuando dolía. En sus conferencias y escritos citaba al Apóstol no como adorno, sino como brújula. Hablaba del deber, de la decencia, de esa independencia interior que ningún poder totalitario puede confiscar.
En la isla del eufemismo, Vallín prefirió la claridad, esa forma suprema del coraje.
Su vida fue un acto de resistencia intelectual. Nunca levantó un arma, pero empuñó algo más temible: la razón. La usó contra el dogma, contra la mentira, contra el olvido. Su ejemplo nos recuerda que la libertad empieza en la mente y se defiende con la palabra, incluso cuando la palabra parece inútil.
Hoy su ausencia no deja un vacío, sino una tarea. Porque la patria que amó, esa Cuba profunda, culta, posible, aún espera a quienes se atrevan a pensarla libre. Y porque, como escribió Martí, “morir no es nada; lo terrible es no vivir”.
Wilfredo Vallín Almeida vivió. Y por eso, no ha muerto.