La Conferencia “Salvar a Cuba” reunió voces opositoras que destacaron la necesidad urgente de un nuevo liderazgo en la Isla.
(Cuba Sindical) – Lo ocurrido en los primeros días de septiembre —entre ellos, el enésimo colapso del sistema electroenergético nacional— nos obliga a preguntarnos: ¿cuál será el definitivo? La incompetencia del gobierno en general, y del ministro de Energía y Minas, Vicente O. Levi, junto al director de la Unión Nacional Eléctrica, Alfredo López Valdés, en particular, confirma que estos “buenos para nada caen una y otra vez hacia arriba”. El régimen carece de mecanismos de renovación y solo sobrevive mediante la represión y el control absoluto de los medios de comunicación.
Mientras, esa misma casta comunista alardea de riqueza obtenida depredando al Estado, se hunde el país y con él sus ciudadanos. En medio de ese carnaval de miseria, sus dirigentes organizan ostentosos viajes a lejanos destinos, como el sudeste asiático y China, para mendigar sin disimulo ante sus viejos socios ideológicos, siempre a costa del maltrecho erario público.
Tan paralizado está el sistema en su decrepitud que, ante el despliegue militar de su “archienemigo” contra la narcodictadura venezolana de Nicolás Maduro —cofrade de tantas aventuras y desventuras—, ni siquiera respira para no hacerse notar, temeroso de convertirse en el próximo objetivo del halcón Marco Rubio.
La Central de Trabajadores de Cuba, sindicato oficial incapaz de regenerarse democráticamente, se humilló una vez más ante el Partido Comunista con la designación de Osnay Colina, exgobernador de Villa Clara, como nuevo secretario general. Sustituye a otro “puesto a dedo”, Ulises Guilarte, quien fue desplazado hacia otras funciones. Colina, en sus primeros pasos, destituyó a tres jefes sindicales sectoriales sin ofrecer explicación alguna. Nadie dude que antes de abril será miembro del Consejo de Estado.
Frente a este panorama asfixiante, la Conferencia Internacional “Salvar a Cuba”, celebrada por el 35 aniversario del Directorio Democrático Cubano, marcó una diferencia. Allí se debatió sobre el futuro de la democracia en Cuba y participaron líderes políticos, académicos y activistas del exilio, junto con una delegación de la Asociación Sindical Independiente de Cuba (ASIC) desde la Isla. Los temas tratados incluyeron: la situación actual en Cuba, la necesidad de cambio y unidad prodemocrática, la represión y la respuesta ciudadana, las alianzas internacionales del régimen con gobiernos totalitarios y organizaciones terroristas, la solidaridad internacional y el compromiso del pueblo cubano.
En su intervención, el secretario general de la ASIC, Iván Hernández Carrillo, expuso tres ideas centrales: la libertad inmediata para todos los presos políticos; la unidad de acción entre todas las fuerzas democráticas; y la persistencia en la lucha hasta lograr una Cuba libre y democrática. Este conclave ofreció un hálito de esperanza para quienes, dentro de la Isla, siguen trabajando por la libertad y la prosperidad.
La conferencia organizada para el 35 aniversario del Directorio Democrático Cubano reafirma que otro liderazgo es posible.
Que Dios bendiga a Cuba y a los cubanos.
Cuba Sindical, lunes 15 de septiembre de 2025